Para los más
pequeños, aprender valores importantes a través de cuentos es la
forma más
sencilla y divertida, ya que estarán asimilándolos mientras se dejan llevar
por fascinantes
historias. Por ello, Mundo Primaria te propone esta serie de cuentos
con valores para
que los más pequeños interioricen sus enseñanzas y las lleven a su
día a día.
Los cuentos son
una parte muy importante del crecimiento de los niños, pues les
permiten
empatizar con el mundo, desarrollar su imaginación y resolver conflictos.
El cuento es una
de las bases para el desarrollo intelectual. Al contarles una historia
podemos lograr
que entiendan las cosas con más rapidez, que su cerebro trabaje
con más certeza,
se estimule su memoria y sus ganas de expresarse.
Los relatos
populares son una buena manera de aproximarse a las raíces culturales
de la humanidad.
Son historias capaces de dejar pequeños mensajes en el
ambiente que
abren nuestra mirada a otros mundos a nuestro alrededor, que nos
ofrecen la
memoria de otras gentes y de otros pueblos.
Los cuentos
infantiles son una buena forma de crear un lazo de unión con los niños,
fomentar su
imaginación y su creatividad, ahuyentar los temores y en muchos casos
hacerles sentir
más valientes al inspirarse en sus personajes favoritos.
Como maestros de
Educación Infantil también tenemos varios momentos a lo largo
del día para
contar un cuento a nuestros alumnos. Podemos hacerlo de forma
rutinaria y
establecer una hora concreta todos los días (antes de salir al patio, en la
asamblea o antes
de irse a casa), o podemos elegir el momento en función
de cómo se sienta el grupo.
Los cuentos son
muy buenos para relajar a nuestros alumnos cuando están
especialmente
inquietos. Es también una buena idea tener un objeto, como un
sombrero o una
varita mágica, que los niños relacionen directamente con este
momento.
A la hora de
contarles un cuento es importante dar a cada personaje una voz,
gestos y
personalidad propios, para que el niño consiga imaginar la historia que le
contamos.
Nosotros también tenemos que hacer el ejercicio de imaginarla, ya que
así será más
creíble para ellos. Tenemos que poner la entonación adecuada, llevar
un ritmo de
narración que le mantenga interesado e, incluso, actuar.
Escuchar
historias hace a los niños más reflexivos ya que, en ellas, encuentran un
mensaje que los
lleva a comprender la forma en que deben actuar y comportarse,
aprenden a
escuchar con atención y a ser pacientes, fomentamos la empatía o
capacidad para
ponerse en el lugar del otro.
También se pueden
hacer actividades para desarrollar el pensamiento lógico-
matemático como
secuenciar las escenas del cuento, el material, el principio, el
final, ordenar
las acciones a partir de dibujos, contar personajes, animales, objetos
o hacer disparates
sobre el espacio y el tiempo. Para comprobar el nivel de
comprensión se
pueden realizar preguntas sobre la historia, recordar características
de los personajes
o partir de las ilustraciones para recrear de nuevo el cuento.
Podemos hacer
actividades musicales como imitar a los animales, realizar
diferentes
actividades plásticas como hacer un dibujo sobre el cuento, los entornos
o los personajes,
inventar canciones sobre cada uno de ellos, escuchar o buscar
canciones que se
puedan relacionar con diferentes momentos del cuento y se
pueden recortar
secuencias del cuento y ordenarlas o hacer un puzzle con un
dibujo del
relato espero les guste y no dejen de compartirlo en sus redes sociales .